La Chiva recorrió el centro histórico de Suba, en la noche despejada del sábado.
Al iniciar el recorrido, la primera sorpresa fue encontrar la
tradicional casa campestre “El Retorno”, puesta en venta, con un proyecto de
apartamentos. La casa años atrás, funcionó como un lugar de eventos
especiales de bodas y congresos.
Camino hacia
la plaza principal, algunas casas coloniales están atiborradas de densos
grafitis. Una expresión muy normal en cualquier lugar del centro histórico.
Como pasó en "La Candelaria", también en Suba hay casas
lúgubres, su fachada lo dice todo. Esta casa tiene en particular algo: un
sótano, que la hace más miedosa y solitaria.
En la esquina de la plaza principal, la "Casa de la participación", espacio cultural, que
aloja material impreso importante de la historia de Suba.
Construcción de mediados del siglo XX, que
permanece sola, refleja un ambiente fantasmal, y evoca "La Candelaria" del centro de Bogotá.
Suenan las campanas, llegan los
feligreses a la misa del sábado, de las 7 pm. La invitación colectiva al recogimiento
y la oración. Es el momento para pedirle a Dios por nuestro país y nuestra
ciudad.
Al lado de la Iglesia, queda uno de los centros de enseñanza más tradicionales de la ciudad, el Colegio Agustiniano de Suba, allí con la tutela de los padres, se educan centenares de alumnos con la regla sabia del catolicismo.
En la esquina de la plaza principal, está la sobria construcción
de la Alcaldía Local. Es el sitio donde se ejecutan actos administrativos,
que buscan dignificar el oficio del rebuscador, proporcionándoles espacios
seguros, a lo largo de los corredores viales de la localidad.
Estas políticas son verificadas por los miembros de la Junta Administradora Local, ubicada en una antigua edificación, a la vista de un costado de la plaza principal de Suba.
Camino a casa, hacemos una
parada en la tradicional panadería "Lalepan", y el olor a chocolate con queso invita a entrar y calentarse, porque el frío de Suba es páramo. El centro histórico es un sitio recomendado, para pasar un
rato agradable, y llevarlo siempre en el corazón!
Foto reportaje: César Ramírez M. - Trabajo de campo: Juliana Sánchez D.












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